sueño
que nado en un mar y me acuerdo de cosas que quizás nunca ocurrieron †
XVI
Durante estas ocho
horas de sueño profundo espero con los brazos cruzados
Me deprime por completo
desperdiciar esta
oportunidad única
de ir hacia el fondo de
los sueños
para no volver jamás a la ciudad encantada
para no volver jamás a la ciudad encantada
Volviendo a la ciudad
encantada
con una copa de vino en cada uno de mis dedos de los pies
con una copa de vino en cada uno de mis dedos de los pies
Bajo caminando mis
miserias por una escalera mecánica,
hacia ese edificio interminable
en el fondo de los sueños
hacia ese edificio interminable
en el fondo de los sueños
Tomo con mis dedos
aceitados un racimo de uvas en el fondo de una canasta llena de humo
Tomo con mis manos la cola del caballo, una cola de cartón con retazos de hilo y pelo pegados
Una cola de cartón que fue clavada en la espalda de un ente invisible que corría
Una cola de cartón que fue clavada en lo invisible
que fue incrustada en lo invisible de un cielo con un clavo doblado
Tomo con mis manos la cola del caballo, una cola de cartón con retazos de hilo y pelo pegados
Una cola de cartón que fue clavada en la espalda de un ente invisible que corría
Una cola de cartón que fue clavada en lo invisible
que fue incrustada en lo invisible de un cielo con un clavo doblado
Son esos tus ojos: los que me miran desde el
cielo deslucido, y aterrizan como águilas sobre lo que antes fueran ruinas
sagradas y hoy yacen bajo el sol del mediodía aplastadas por los bancos de
agua.
(Mes de Julio de 2011)
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